Con el reflejo de la almadraba aún en sus orillas, las arenas de esta playa siempre han marcado la historia del antiguo asentamiento pesquero de Zahara de los Atunes, convertido en un enclave turístico que contiene hoteles y residencias desde los que se puede acceder a la playa.
Con una superficie de arena seca bastante ancha, la desembocadura del río Cachón y dunas intercaladas con asentamientos urbanos, es una playa que tiene todo lo necesario para agradar a los diferentes usuarios.
Como curiosidad, los Duques de Medina Sidonia residían en un palacio a pie de playa, durante la temporada de la levantá de la almadraba. Además, antiguamente en este palacio se manufacturaba el atún que se capturaba.
En 2018 obtuvo otro año más la Bandera Azul y el Certificado de Calidad Turística.
